Scyphophorus acupunctatus adulto |
El
insecto que vemos en la imagen, se trata de una nueva especie
invasora para la Península Ibérica. Su nombre es Scyphophorus
acupunctatus Gyllenhal, 1838, conocido popularmente
como picudo negro del agave, de la pita o max del henequén, es un
coleóptero de la familia Dryophthoridae, antiguamente incluida
dentro de los curculiónidos. Es pariente cercano del picudo rojo de las palmeras (Rhynchophorus ferrugineus) que tantos estragos está
causando en las palmeras cultivadas de este país y tantos otros.
Se
considera insecto “plaga” en cultivos de ágave, principalmente
para la producción de tequila (pudiendo reducir en un 40% la
producción), aunque también de otros cultivos de la misma familia,
las agaváceas.
Esta
especie se encuentra ampliamente distribuida por el mundo. Se
extiende desde el sur de Estados Unidos de américa hasta Brasil,
Hawai, Borneo, Java, Australia y África.
En
la Península Ibérica fue citado por primera vez en 2007 por Josep
M. Riba i Flinch, Miguel Angel Alonso Zarazaga. Desde entonces se han
podido encontrar poblaciones de este insecto en Cataluña, Valencia, Murcia y
Alicante. En el mediterráneo afecta principalmente a ejemplares de
Agave americana, cultivada como ornamental en algunos lugares y
asilvestrada en muchos otros siendo una planta considerada como
invasora.
El
insecto de la primera foto fue encontrado en el Parque Natural de las Salinas de Santa Pola (Alicante) en una
zona de dunas litorales con abundancia de piteras, que como ya hemos
dicho es su planta nutricia. Las otras dos fotos fueron tomadas junto al campus de Espinardo de la Universidad de Murcia.
El
picudo negro ha podido llegar a España de dos formas. La principal
hipótesis es la llegada accidental, en alguna importación, sin las medidas de control fitosanitarias exigibles, de
plantas ornamentales procedentes de algún país donde ya existía esta especie.
La segunda hipótesis, puede ser la liberación intencionada en el medio para
tratar de combatir las piteras, consideradas plantas invasoras, que crecen asilvestradas en los
espacios naturales y que tanto dañan a los ecosistemas al competir
con las especies autóctonas.
Sea
como sea, se trata de una especie alóctona e invasora y sería necesaria la
realización de estudios para garantizar que Scyphophorus no es capaz de dañar a
ninguna planta autóctona.
Agave americana muy afectado por este insecto. |
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