Líquenes de Miramontes

Psora saviczii (Ejemplo de liquen heteromorfo)

El esta jornada de campo me he dedicado al estudio de unos seres que están en casi todas partes y que casi siempre pasan inadvertidos, los líquenes. Del colegio sabemos que los líquenes son unos organismos simbiontes, formados por un alga o cianobacteria (conocida como ficobionte) que aporta energía y proteínas obtenidas por la fotosíntesis y un hongo (llamado micobionte) que proporciona una estructura resistente para la vida fuera del agua. Pero poco mas conocemos de estos apasionantes seres.

Squamarina lentigera (Ejemplo de
liquen folioso)
Los líquenes juegan un papel muy importante dentro de los ecosistemas. Son los primeros seres en comenzar la colonización de nuevos territorios y el primer ser en comenzar a formar una capa de suelo que podrá sustentar a la vegetación posteriormente. Los líquenes suelen ser bastante específicos a la hora de elegir un sustrato sobre el que desarrollarse. Además de vivir sobre las rocas, hay especies adaptadas a vivir exclusivamente en madera muerta, en las cortezas de los árboles, sobre hojas de plantas, sobre el suelo desnudo, en zonas intermareales de la costa, etc. así como en cualquier clima, por extremo que este sea.

La estructura de los líquenes puede ser bastante simple cuando ambos organismos simbiontes se encuentran por casualidad, pero hay otros que forman estructuras muy complejas. El cuerpo del liquen se llama 'talo', y puede estar formado por varias capas o estratos, en los que generalmente, la parte exterior o córtex está compuesto por hifas apretadas del hongo, una capa mas interna donde aparecen las células del alga mezcladas con el hongo, y por último, más hifas formando una especie de médula. 

Caloplaca saxicola

La forma del simbionte liquénico viene casi siempre establecida por el micosimbionte. De este modo, podemos dividirlos en los siguientes tipos atendiendo a su forma:

Líquenes crustáceos son aquellos que crecen fuertemente unidos al sustrato, siendo imposible separarlos de este sin destruirlos. Pueden desarrollarse sobre las rocas, sobre madera o corteza de plantas, en sus hojas o en el interior de microfisuras en las rocas. Estos líquenes son los más resistentes a las condiciones meteorológicas, resistiendo muy bien la sequía y la insolación.

Sin determinar
Líquenes foliosos forman un talo que está parcialmente separado del sustrato, suelen presentar una estructura dorso-ventral, es decir, la parte superior es diferente de la inferior. Pueden ser laciniados o umbilicados según su forma. Una característica de algunos de estos hongo es la capacidad de cambiar  su forma, al hidratarse se despliegan totalmente y al deshidratarse se retraen sobre si mismos, a este grupo pertenece la "planta" llamada rosa del desierto que se puso de moda hace algún tiempo.

Líquenes fruticulosos son aquellos que forman estructuras alargadas, algunos de ellos se asemejan a cabelleras. La unión de estos líquenes al sustrato suele producirse en un único punto del que posteriormente se ramificaran, algunos muy profusamente. A este grupo pertenecen las llamadas "barbas de viejo" que recubren la vegetación de los bosques húmedos. 

Líquenes heteromorficos son los que que presentan una diferenciación entre el talo que sirve de aderencia al sustrato y el encargado de la reproducción.  

Teloschistes lacunosus (Ejemplo de liquen
fruticuloso)
Los líquenes se pueden reproducir de forma asexual por simple fragmentación del talo (a modo de esqueje) o bien por unas estructuras llamada soredios constituidos por una hifa del hongo que recubre algunos elementos del alga.  Estas estructuras son dispersadas por el viento o las gotas de lluvia.

La reproducción sexual se produce de forma  independiente por parte del hongo y del alga. Para la diseminación de las esporas, el hongo produce unas estructuras conocidas como apotecios o peritecios, las esporas diseminadas trataran de encontrar un nuevo ficobionte con el que asociarse, que puede ser la misma especie o distinta, dependiendo del grado de especialización del hongo, para volver a producir otro organismo en simbiosis.

Estos seres son unos muy buenos bioindicadores de la calidad del aire, por ser susceptibles a contaminantes como el dióxido de azufre, apareciendo o desapareciendo determinadas especies o deteniendo su crecimiento, según el grado de contaminación atmosférica. Por lo tanto, es muy interesante realizar estudios para conocer los líquenes de nuestros ecosistemas y ciudades.

Fulgensia subbracteata & Toninia sedifolia

El lugar escogido para la jornada de campo ha sido la microrreserva de flora de Miramontes, el lugar donde se celebró el "I Testing de Biodiversidad de Villena" en junio de 2010. Este paraje consta de varios hábitats de gran valor ambiental y bien conservados, siendo el ecosistema de saladar y el de estepa sobre yesos los mejor conservados, y este último, ofrece un ambiente muy propicio para el desarrollo de los líquenes, siendo importantes para impedir la erosión del suelo ya que llegan a alfombrar literalmente las zonas desprovistas de hierbas o arbustos.

En apenas dos horas de visita, sin realizar una búsqueda demasiado exhaustiva, ni peinando una gran zona, han aparecido las siguientes especies (a falta de unas cuantas por determinar), lo que da una idea de la riqueza biológica de este tipo de parajes, tan frágiles por otra parte.

Xanthoria parietina
  • Caloplaca arnoldii (Wedd.) Zahlbr.
  • Caloplaca aurantia (Pers.) J. Steiner
  • Caloplaca saxicola (Hoffm.) Nordin
  • Candelariella aurella (Hoffm.) Zahlbr.
  • Candelariella subdeflexa (Nyl.) Lettau
  • Cladonia foliacea (Hudson) Willd.
  • Diploschistes diacapsis (Ach.) Lumbsch.
  • Diplotomma alboatrum (Hoffm.) Flotow.
  • Fulgensia subbracteata (Nyl.) Poelt
  • Lecanographa grumulosa (Dufour) Egea & Torrente
  • Lecanographa sp.
  • Lecanora dispersa (L.) Sommerf.
  • Lecanora horiza (Ach.) Linds.
  • Lecanora meridionalis H. Magn
  • Physcia adscendens (Fr.) Oliv.
  • Psora decipiens (Hedwig) Hoffm.
  • Psora saviczii (Tomin) Follman & Crespo
  • Psora vallesiaca
  • Squamarina cartilaginea (With.) P. James
  • Squamarina lentigera (Weber) Poelt
  • Squamarina sp.
  • Teloschistes lacunosus (Rupr.) Saviz 
  • Toninia albilabra (Dufour) H. Olivier
  • Toninia aromatica (Turner ex Sm.) A. Massal.
  • Toninia diffracta
  • Toninia lutosa
  • Toninia sedifolia (Scop.) Timdal
  • Verrucaria nigrescens Pers.
  • Xanthoria parietina (L.) Th. Fr.
He de dar las gracias a Armando Tomás y a los demás expertos por las determinaciones en la Web de Hongos y líquenes de Biodiversidad Virtual.

Caloplaca aurantia (Ejemplo de liquen crustáceo)

El Jardín del Regajo de Villena

Interior del jardín, se pueden ver ramas cortadas
de los Pittosporum tobira talados.

Todo aquel que haya conocido este jardín no podrá evitar echar la vista atrás y recordar tiempos mejores en que el jardín estaba mas verdes y mucho más frondoso. Este jardín, que data de 1902, se encuentra en Villena, al inicio de la Carretera de Peña Rubia.

A día de hoy no quedan más que los restos de lo que fue uno de los mejores jardines de Villena, y porqué no decirlo, de la provincia de Alicante. Sin duda, ha sido el más interesante desde el punto de vista botánico debido a las especies que lo conformaban y de las que todavía persisten algunos retazos de todo lo que llegó a haber en un pasado no muy lejano. Por su situación, este antiguo jardín de recreo ha sido y es muy utilizado por la fauna especialmente de aves.

Vista general del jardín

Del jardín original, apenas han llegado a nuestros días unas cuantas especies de árboles, arbustos y plantas trepadoras como el Polygonum aubertii de la pérgola o las hiedras que recubren algunos árboles. Esta pérdida progresiva de diversidad botánica se debe fundamentalmente  dos factores clave.


Árbol seco cubierto de hiedra
también seca
En primer lugar, el abandono. El cese de las actividades de mantenimiento que precisa un jardín como son los riegos, podas y demás cuidados necesarios originó el envejecimiento paulatino de toda la vegetación, y la posterior muerte de muchos de los ejemplares, o bien de forma directa, por la edad, como ocurre con la mayoría de los aligustres, que eran los más grandes de Villena y habían alcanzado el tamaño máximo que puede alcanzar la especie.

Las especies más exigentes en recursos hídricos como los olmos, algunas coníferas ornamentales como abetos, cipreses (posiblemente Cupressus lusitanica o C. macrocarpa), una tuya en forma de bola (Platycladus orientalis 'Compacta') o las palmeras (Trachycarpus fortunei, incluyendo una curiosidad, un ejemplar con el estípite bifurcado en altura), fueron debilitándose para finalmente morir directamente por la sequía o por enfermedades oportunistas.

Porte del Boj
Todas estas muertes de árboles origina una gran acumulación de madera muerta, esta es la segunda causa de la destrucción del jardín. Toda esta acumulación de madera parece ejercer un "efecto llamada" sobre los buscadores de leña que acuden al Regajo con sus motosierras. Estas actuaciones no deberían suponer ningún problema si la gente se limitase a recoger solamente la leña de los árboles muertos o abatidos por las tormentas como había sucedido hasta no hace demasiado tiempo, y es que de un tiempo a esta parte, se han venido talando ejemplares vivos como es el caso de varios ejemplares de árbol de las pagodas (Sophora japonica), un árbol del amor (Cercis siliquastrum) de gran tamaño, y de nuevo los más grandes presentes en el municipio, y lo que es más grave, más reciente se han talado al menos dos ejemplares de pitosporo (Pittosporum tobira) con porte arbóreo. Debido a su crecimiento sumamente lento, es muy raro encontrar en jardinería ejemplares con este porte, y los ejemplares talados eran comparables en tamaño y en edad a los del Paseo de Chapí.

De las especies vivas que quedan en este jardín, sin tener en cuenta la pinada de pinos carrascos (Pinus halepensis), destaca un ejemplar de varios troncos de árbol de las pagodas, que si bien está afectado por hongos xilófagos, que se alimentan de su madera, tiene un tamaño considerable y debe respetarse. También hay en el jardín restos de laurel, solamente unos rebrotes de la base de antiguos ejemplares de porte arbóreo.

Detalle del Boj
Las joyas de este jardín, son por su rareza y su escasez en los jardines ibéricos al menos tres ejemplares de boj (Buxus sp. posiblemente Buxus microphylla) con porte arbóreo destacando uno de ellos por su tronco recto y bien formado. aun así, estos arbolillos están bastante deteriorados y presentan muchas ramas secas siendo aconsejable una poda cuidadosa de limpieza.

La otra rareza botánica presente en este jardín son los almeces, representados por dos ejemplares adultos, uno de gran porte abierto y muy ramificado desde poca altura con ramas horizontales, y el otro mas pequeño y de porte más elevado por haber crecido con más competencia lateral por otros árboles, y muchos otros ejemplares con porte arbustivo.

Fruto del Celtis
Si bien estos almeces habían sido citados en otros trabajos como Celtis australis, la especie típica del mediterráneo, una observación más minuciosa nos hace descartar la idea. Si comparamos los ejemplares del jardín con la especie C. australis veremos bastantes diferencias. Para empezar, el porte de los del Regajo es mucho más abierto y menos ramificado, y sus ramas se arquean de forma característica, su corteza está muy agrietada, formando costillas verticales de corcho, sus frutos son de un tamaño más reducido, menos redondeados y de color rojo y no negro, y sus hojas contienen una nerviación diferente. Estas características me hacen pensar que se trate de la especie asiática Celtis tetrandra, de la que existe un ejemplar comparable en tamaño y edad en el Jardín Botánico de la Universidad de Valencia.

Existen además restos de otra especie muy escasa y también de origen asiático como es el jabonero de la china (Koelreuteria paniculata) del que apenas quedan unos restos de pequeño tamaño.

Dados los valores botánicos, históricos y del emplazamiento del jardín, situado en una zona emblemática a donde los Villeneros acuden año tras año para comer la mona de pascua, debe ser exigible la protección y mejora de este lugar.

Porte del Celtis tetrandra

En primer lugar, para garantizar la supervivencia de las especies arbóreas singulares, hay que otorgarles protección legal, y amparándonos en la Ley 4/2006, de 19 de mayo, de Patrimonio Arbóreo Monumental de la Comunidad Valenciana, declarar como árboles de interés local, al menos los ejemplares de Celtis tetrandra, los Buxus microphylla y el Pittosporum tobira.

En segundo lugar, realizar actuaciones de mejora que consistan en:

  • Podas de limpieza, eliminando únicamente la madera muerta, efectuadas por personal debidamente cualificado para realizar actuaciones en árboles de semejante valor.
  • Eliminación de árboles secos del lugar para evitar el efecto llamada antes mencionado.
  • Limpieza de los vertidos de escombros y basuras presentes en el lugar.

Por último, es deseable una labor divulgativa de los valores de estos árboles, basándonos nuevamente en su importancia botánica, histórica y estética de estos ejemplares y su entorno, sin importar su propiedad.

Vista desde el jardín con el Castillo de la Atalaya al fondo

Un bosque en una hoja de olivo


Existen millones de cosas que pasan desapercibidas a nuestros ojos por su pequeño tamaño. En la imagen de arriba podemos ver esta escena que se asemeja a un tipo de bosque sacado de alguna película futurista o de ciencia ficción. Se trata simplemente de una colonia de hongos sobre una hoja de olivo en descomposición.

La especie de hongo en cuestión se conoce como Marasmius corbariensis (Roum.) Singer (1951), un diminuto Basidiomiceto que es típico de la hojarasca de olivos y acebuches (Olea europaea).

Los sombreros de estas setas en miniatura miden entre 2 y 7 milímetros, son de color pardo-rojizo con las láminas de color blanco. Tras la madurez se descomponen y queda únicamente el pie, que suele medir hasta 4 centímetros de largo, con aspecto filiforme y color oscuro.

En la Península Ibérica existen, además, otras especies del género Marasmius, pero ninguna de ellas se desarrolla en hojas de olivos, con lo que esta especie resulta inconfundible.