Narcisos

Narcissus moschatus

Los narcisos (Narcissus sp.) son una de las primeras flores en aparecer a finales de invierno y principios de primavera, aunque existen algunas especies de floración otoñal. Los narcisos son plantas bulbosas que utilizan un tallo subterráneo modificado que recuerda a una cebolla de pequeño tamaño.

Narcissus dubius
Los narcisos reciben su nombre por la forma en que sus flores crecen inclinadas hacia abajo, como el narciso de la mitología griega que no podía dejar de admirar la belleza de su reflejo en el agua, enamorado de si mismo murió ahogado tras lanzarse a las aguas, en ese lugar nació una flor que recibió el nombre de narciso en su memoria.

Se trata de una planta medicinal con propiedades antiespasmódicas, astringentes, eméticas, febrífugas, aunque su uso ha de estar controlado por facultativos por ser especies algo tóxicas.

En la península ibérica podemos encontrar unas 36 especies con diversas subespecies algunas de ellos y algunos híbridos naturales creciendo de manera silvestres, siendo algunas de ellas muy raras y de escasa distribución.

Los narcisos que se cultivan en jardinería suelen ser variedades híbridas que producen flores de mayor tamaño o colores más vistosos. Ya sean especies autóctonas como ornamentales, son una muy buena planta para el jardín, gracias a su rusticidad pueden asilvestrarse en un prado donde florecerán año tras año sin necesidad de desenterrar los bulbos salvo para multiplicarlos.

Narcissus papyraceus

1 comentario:

Margó dijo...

Qué guapos son los narcisos blancos... y los de flores pequeñinas que te encuentras por el monte... esos son.. preciosos.
un saludo.